martes, 25 de julio de 2017

Lo que el ojo no ve (o la viga en ojo propio)


Publicado originalmente el 24-07-2017


Desde hace aproximadamente tres semanas estoy leyendo la novela "Sherlock Holmes contra Fu Manchú" (1984). Poco me falta para terminarla, y la acabaré, aunque Cay Van Ash dé a veces tantos rodeos como un servidor (pero sin llegar a la dimensión de Umberto Eco, por lo que no desaconsejo disfrutar de esta aventura).
Aprovecho y por enésima vez le agradezco a Alberto Cabrera, del Círculo Holmes, quien me obsequió con un ejemplar para poder disfrutar en su extinta edición en papel de Planeta (1989).
Ahora bien, entre esta lectura y sucesos recientes, hace unos días comenté cómo retomaba cierta historia de espada y brujería que tenía en un cajón. Encontré múltiples correcciones y rectificaciones, y quedó de tal modo que me gusta, pero no me apetece continuarla. No tengo claro cómo seguir con esa historia tras un inicio como el que he escrito (y que, insisto, me gusta).
Tras este "entrenamiento", he retomado la que será la novela de steampunk mientras otras cosas maceran en nevera por mucho que los nervios me corroan (es parte del proceso y hay que asumirlo).
Y tal como comentaba días atrás, qué gran favor me han hecho.
Así, como si de un anuncio de detergente se tratara, veamos cómo cambia un texto antes y después de haber "actualizado" mis filtros dar brillo y esplendor.
He aquí un párrafo de muestra tal y como estaba inicialmente:
"El lago Cryl reflejaba en todo su esplendor el azulado cielo de aquella zona al norte de la ciudad de Asgorn, en combinación con cientos de destellos perlados sobre su tranquila superficie. El manto de las aguas apenas se rompía por un tímido chapoteo aislado o por algún minúsculo remolino, probablemente fruto de la curiosidad de algún pez que asomaba a la superficie. Arriba, en el cielo, un grupo de aves volaba en formación sobre las aguas rumbo norte como perfecto complemento de un paisaje que emanaba tranquilidad y belleza."
Y he aquí cómo quedó tras una primera revisión de ayer noche (que nadie dice que sea la definitiva, pero casi):
"El lago Cryl, al norte de la ciudad de Asgorn, reflejaba en todo su esplendor el azul del cielo. El manto de las aguas lucía cientos de destellos perlados y su superficie estaba en calma absoluta, apenas rota por algún tímido chapoteo aislado o por minúsculos remolinos. Un grupo de aves volaba en formación rumbo norte como perfecto complemento de un paisaje que emanaba tranquilidad y belleza."
Algo más de una línea menos de texto y creo que con mucho mejor resultado.
Efectivamente, quien haya leído aquel libro que me niego a mencionar por enésima vez, sabrá que hay un ejemplo idéntico al respecto (creo) de la novela Carrie. Pero claro, no es lo mismo experimentarlo en tus propias carnes.
Más allá de este párrafo, hay bastante más de cien folios ya escritos y los capítulos que están por redactar, pero a gusto que uno lo trabaja.
Ahora, tal como decía en los viejos tiempos, let's rock!
Postdata final: No entiendo todavía cómo funciona el editor de blogspot, por lo que pido perdón las incongruencias visuales

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